Pasados unos días desde su paso por los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, el jiennense Sebas Martos ha aprovechado para analizar lo que fue su actuación en la prueba de 3.000 m obstáculos.
A través de un vídeo en su cuenta de Instagram, Martos agradecía todos apoyos recibidos durante los últimos días y reconocía que llegaba a la cita olímpica «con muchísimas ganas, habiendo recuperado mi estado de forma, uno de mis mejores estados de forma de siempre».
Un buen estado físico al que sumaba «la madurez de mis 32 años y la tranquilidad de haber estado en este tipo de campeonatos y saber un poco cómo va todo esto y qué es lo que hay que hacer para intentar estar en la final del 3.000 m obstáculos».
«Esto es muy difícil, esto son los Juegos Olímpicos», destaca Sebas Martos, quien también incidió en que «el nivel fue altísimo. Los pasos que se necesitaban para pasar a la final no se veían desde hace 22 años, en el Mundial de Sevilla de 1999».
Analizando lo que fue su carrera, el atleta de Huelma considera que su actuación fue correcta aunque explica que «en la primera parte estuve un poco con sensaciones de flojera, no me veía muy activo. No logré encontrar sensaciones. Son cosas que pueden pasar en carrera, no siempre todo es perfecto. Logré encontrar sensaciones y acabar con un tiempo de 8:23, que creo es un tiempo correcto, pero me deja con sensaciones de querer mucho más. No estoy del todo satisfecho pero tampoco insatisfecho».
Por encima de todo, Sebas Martos prefiere extraer conclusiones positivas de su paso por Tokio 2020: «Con el tiempo valoraré esta actuación, sobre todo por todo el camino que me ha llevado hasta aquí, con una pandemia de por medio. Ha sido largo y duro pero ha sido satisfactorio, esto es un aprendizaje muy grande de cara al futuro. Habrá que intentar preparar otro ciclo olímpico hasta París 2024, ¿por qué no intentarlo?».
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