JAÉN RUGBY 8-15 RUGBY ALCALÁ
Partido intenso, igualado el que han disputado este fin de semana Jaén Rugby y Rugby Alcalá correspondiente a la 9ª jornada de liga en el grupo de C de División de Honor B. El resultado –8 a 15- es un fiel de reflejo de lo visto sobre el césped de Las Lagunillas en la desapacible tarde del sábado. Jaén Rugby demostró en el último partido del año que puede competir contra cualquiera de los equipos de la parte alta de la tabla. Falta esa pizca de “algo” para conseguir lo visto contra CAR Sevilla. Que cada cual elija el condimento, ese “algo”, para que el plato esté al gusto de todos.
Jaén Rugby sigue creciendo en su juego de delantera, pero una vez más ha comprobado cómo sus rivales cortocircuitan uno de sus puntos fuertes: la velocidad de sus tres cuartos. Esta vez, Rugby Alcalá contó con la lluvia y el viento como aliados para dificultar ese juego a la mano. En esas condiciones, la capacidad defensiva, la disciplina o la precisión en pases y recepciones se convierten en virtudes claves para inclinar la balanza hacia un lado u otro.
Y así ocurrió en esta 9ª jornada. En un partido tan igualado, los detalles resuelven. Pudo ensayar Jaén Rugby en los primeros minutos gracias a dos golpes de castigo casi consecutivos de los madrileños, pero un pase largo casi a cinco metros de zona de marca no encontró unas manos que lo recibieran el oval en buenas condiciones. Poco después, un resbalón en la veintidós jiennense abrió las puertas a Rugby Alcalá para conseguir su primer ensayo. Ese 0-5 no desanimó al XV de Jaén. Con ese resultado se llegó al descanso, marcador defendido por los locales con un jugador menos por amarilla.
Poco después de comenzar la segunda mitad, Manu González recortó distancias gracias a la transformación de un golpe de castigo casi desde medio campo. Con ese 3-5 se llegó al último tramo del encuentro. Esos quince minutos locos donde se resolvió el partido. En el minuto 65, el nueve alcalaíno encontró un pasillo entre la cal de la banda y un ruck que le condujo hasta la zona de marca (3-10).
No estuvieron los de rojo acertados en los tiros a palos y esa circunstancia mantuvo a los jiennenses dentro de partido. Tanto que ensayaron en la siguiente jugada. Dicho así parece sencillo. Pero la marca de Jorge Segura cerca del banderín viene precedida de una gran jugada con el sello Jaén Rugby. Porque había que recuperar el saque de centro. Lo hizo Agustín Arburúa. Había que avanzar casi cuarenta metros. Se los repartieron Germán Díaz, Gabri López, César Díaz, y Mario Cano en sucesivas fases. Y rematar sobre la línea que lo hicieron Manu Torres con su pase y Segura con un posado demasiado esquinado para que Manu González venciera la resistencia del viento con su patada (8-10).
Algo debió ver el colegiado Daniel Sarrión tras este ensayo porque, cuando los jugadores jiennenses se colocaban en su campo para recibir la pelota, mostró una nueva amarilla a un jugador jiennense y, el saque de centro se convirtió en golpe de castigo. Esa superioridad numérica fue insalvable tanto para que los de verde mantuvieran el balón, a pesar de recuperarlo, como para evitar que el equipo visitante encontrara de nuevo el hueco en el otro extremo de campo.
El tercer ensayo de Rugby Alcalá fue el definitivo. Y no porque Jaén Rugby cejara en el empeño. Lo intentó de lejos con un golpe de castigo a unos 50 metros de palos. Lo intentó de cerca ganando metros a la mano, pero sin conseguir alterar el marcador. El tanteo final permite a Jaén Rugby sumar un punto bonus defensivo que no sirve de consuelo hoy. Quizás mañana sea decisivo. El tiempo lo dirá. El equipo jiennense acaba el año con tres victorias en 9 jornadas y 16 puntos.
La competición se para por Navidad. A la vuelta, el 11 de enero, espera Rugby Majadahonda, nuestro más inmediato perseguidor. Ya lo cantaban Ilegales, no hay nada sin lucha. Toca levantarse y luchar. Y ningún equipo de Jaén Rugby rehúye la pelea.
