El Real Jaén se alzó con la XLI edición del Trofeo del Olivo tras vencer al Granada CF por tres goles a dos y que tuvo un final loco de partido, ya que los blancos tuvieron que remontar en el último instante el arreón del empate que conseguirían los granadinos.
Los goles llegaron en el segundo acto. El primero de ellos fue en el minuto 61, obra de Manu López, que adelantó al Real Jaén CF con un disparo cruzado al segundo palo tras un pase de Mario Martos. Cuatro minutos más tarde el propio Mario Martos arrancó desde el centro del campo y batió al portero con un gran disparo desde la frontal del área.
A falta de nueve minutos para el noventa, Sérigné Faye recortó distancias con un cabezazo dentro del área. Cinco minutos después, empataó el Granada CF con un gol de cabeza de Jorge Pascual tras el saque de un córner.
Pero quedaría la guinda de la noche: una jugada coral del Real Jaén CF que Mario Martos finalizó con un gol que dejó el triunfo en casa y el Trofeo del Olivo en las vitrinas del estadio de La Victoria.
Al encuentro, que ha congregado a 1.977 aficionados, ha asistido el alcalde de la ciudad, Julio Millán, acompañado de concejales y concejalas del equipo de Gobierno. Millán ha sido el encargado de hacer entrega del trofeo que acredita a los ganadores como campeones de la 41 edición de este Trofeo.
El partido ha enfrentado a dos equipos que ya saben lo que es ganar dicho torneo. De hecho, el equipo de la capital jiennense ha ganado en 24 ocasiones el torneo, y en esta ocasión ha hecho un esfuerzo importante para poder contar con la presencia de un grande del fútbol andaluz.
Por su parte, el Granada CF ha ganado el Trofeo del Olivo en la única ocasión en la que ha participado. Fue en el año 2014, con locales jugando en el grupo IV de la extinta Segunda División B y los visitantes, en Primera División y con Joaquín Caparrós en el banquillo.