Foto: UE Costa Brava.
Alejandro Copete // @Ale_Copete
Aunque las matemáticas les digan que todavía es posible, que la UE Costa Brava consiguiera la salvación y siguiera en la Primera RFEF sería un milagro digno de Semana Santa.
Los catalanes ocupan la penúltima posición de la tabla con 25 puntos, empatados con el Betis Deportivo como el equipo que menos partidos ha ganado (cuatro) y quienes menos tantos anotan (17).
Y tampoco ayuda a las estadísticas que lleven siete jornadas sin ganar.
Con la salvación a 13 puntos, los de Oriol Alsina se han acostumbrado a empatar en sus últimos duelos. En cuatro de sus últimos cinco partidos han arañado las tablas, viniendo además de jugar entre semana su partido aplazado contra el Sevilla Atlético por Covid de los hispalenses. El resultado fue de empate a cero.
Mini-revolución para la UE Costa Brava en el mercado invernal. Los catalanes aprovecharon la extinción de la UD Extremadura para que varios futbolistas pasaran del azulgrana de Almendralejo al azulgrana de Palamós.
Fran Varela, Dani Pérez, Sergio Gil y Coris, todos ellos con una importante presencia en el juego de la UE Costa Brava.
Procedente del UCAM Murcia llegó también el ariete Nuha, que con tres goles es el máximo goleador de la plantilla. Otro jugador que se ha hecho habitual en la zaga es Campins, que vino en invierno desde Tarazona.
Mientras que en el apartado de bajas registraron las marchas de Xumetra, Calatrava y Gil, entre otros.
Quedan como los jugadores de más confianza del míster Alsina el lateral izquierdo Royo, el portero Marcos (que lo ha jugado absolutamente todo) y el mediocentro Antonio Romero. Monreal, uno de los fijos en la dupla de centrales, será baja al ver la quinta amarilla ante el filial sevillista.
Como visitantes, los catalanes solamente han conseguido ganar una vez. El precipicio parece cada vez más alto para una UE Llagostera que se aferra con débiles dedos al risco que sobresale sobre el abismo.
