Alejandro Copete // @Ale_Copete
Ya hay dos plazas de descenso adjudicadas en el Grupo II de la Primera RFEF. Y todo apunta que la tercera será para el UCAM Murcia CF.
Los azulones, en una temporada para olvidar y cuyas aspiraciones eran completamente diferentes, ocupan la 18ª posición de la tabla con 34 puntos a ocho de la salvación, quedando unos 15 en juego.
Estando patrocinados por una universidad católica, algunos podrían hablar de milagro. Pero las sensaciones no son las mejores tras ver que el tercer entrenador esta temporada (Salmerón y Salva Ballesta fueron destituidos tras 11 y 16 partidos correspondientemente) tampoco reconduce la situación.
Con Aira el equipo ha conseguido una racha de cuatro partidos sin perder, pero solamente una de ellas ha sido una victoria. En las últimas tres jornadas, los murcianos se han abonado al 1-1. A estas alturas y en la situación del UCAM, cada empate es una derrota.
Nadie se esperaba esta mala campaña de los azulones, sobre todo tras el esfuerzo de mantener el bloque que los había llevado a pelear por subir a la categoría de plata y sumar refuerzos de calidad.
A lo largo de la temporada los murcianos han dado siete bajas (entre ellas Admonio, hoy en el Linares Deportivo) y el jiennense Caballero, que se marchó al San Fernando.
La última pérdida fue hace dos semanas, cuando el club anunciaba que el veterano portero Biel Ribas dejaba de formar parte del plantel por “motivos personales”.
También hubo trabajo por parte de la dirección deportiva en el mercado invernal para revertir la posición del UCAM Murcia CF en la liga. Hasta ocho caras nuevas de cierto renombre llegaron a las filas universitarias.
De la diáspora del Extremadura pescaron al ahora portero titular Pedro López y el delantero Rubén Mesa, que se ha convertido en el referente arriba y desde su llegada suma cuatro tantos.
Para una defensa muy goleada (47) regresó “a casa” el lateral derecho Tekio procedente del Logroñés. Otra vuelta al hogar la protagonizó el ex del Atlético Baleares Isi Ros.
El extremo está destacando por servir de revulsivo saliendo desde el banquillo.
Más llegadas fueron la del central Caro, criado en la cantera bética (donde llegó a debutar en Primera División) tras su paso por el fútbol croata; la de Fullana del Nástic, el lateral izquierdo Moi Delgado y Raúl Palma, mediocentro ex del Xerez Deportivo. Este último está lesionado y es la única ausencia del plantel de Aira para la hora de hacer la convocatoria en el duelo ante el conjunto minero.
Ya se plantean también desde las altas instancias del conjunto murciano como sería la hipotética plantilla en la Segunda RFEF. Seguramente quieran seguir con jugadores como Armando, que se ha convertido en el líder de la medular; o con el pichichi Txemi (10 goles).
Este último se rumoreo que puede subir a la Segunda División fichando por el Cartagena. Y la diatriba con el filial, que se ha clasificado para los PO de ascenso de la Tercera RFEF y seguramente su esfuerzo se quede sin premio final.
Según apuntan varios medios de la región, el descenso a la Segunda RFEF conllevaría una bajada de presupuesto por parte de la universidad católica. Hace un año este mismo equipo peleaba por subir a la Segunda División. Ahora afronta una más que posible estancia en la cuarta categoría del fútbol español.
