Alejandro Copete
Un total de 368 equipos conforman esta temporada de la Tercera División 2018/2019. Divididos en 18 grupos, cada uno tiene su propia historia y sus propias metas a conseguir este año. De todas esas 18 subdivisiones de 20, 21 y 22 equipos; pocos serán los llamados a seguir peleando por abandonar la categoría hacia un nivel superior, donde poco a poco se va reduciendo el número de tablas hasta llegar a una única clasificación para todos. A estas alturas de liga, aunque todavía queda muchísimo por disputar, lo lógico sería para aquellos que están en una situación óptima como es el caso del Real Jaén, empezar a mirar que está pasando en otros grupos, ya que si todo no se va al traste, sus rivales en la pelea por el ascenso saldrán de ahí.
Si la Tercera División tuviera un grupo único…
Imaginemos por un momento una Tercera División con un único grupo de 368 equipos con un formato para la postemporada donde los tres primeros subirían automáticamente y el cuarto clasificado jugará una repesca. Ya tenemos claro que los 18 primeros de esa tabla se corresponderían a los líderes de cada grupo. Pues el Real Jaén, con un total de 72 puntos, sería también el líder en dicha hipotética Tercera División. En segundo lugar de esa tabla estaría el Penya Esportiva Santa Eulària (líder del Grupo XI), ya que los ibicencos suman 69 puntos. Completaría el pódium de honor el líder del Grupo XVI, los riojanos del Club Haro Deportivo con 68 puntos. Y en ese imaginado cuarto puesto que cerraría esa también imaginada promoción tenemos a dos equipos empatados con 66 puntos: por el Grupo XIII el mítico Yeclano y por el Grupo IV el Portugalete, ambos líderes de sus clasificaciones, obviamente. Si tuviéramos en cuenta el golaverage general para desempatar, la cuarta plaza sería para los murcianos (+49) frente a los vascos (+41).
El resto de “líderes” de esa clasificación, ordenados por sus puntos obtenidos hasta el momento serían el Socuéllamos (Grupo XVIII), el que rompió los sueños de los lagartos la temporada pasada; Osasuna B (G. XV), Lealtad (G. II) y el representante del grupo hermano andaluz CD Utrera (G.X), estos tres empatados con 64 puntos. Seguirían Las Rozas (G. VII), Zamora C.F (G. VIII); y de nuevo empatados pero esta vez con 61 puntos dos conjuntos: Mérida A.D (G. XIV) y L’Hospitalet (G.V).
El resto de primeros clasificados de grupo no han llegado todavía a los 60 puntos en liga y son el Orihuela (G. VI), Tarazona (G. XVII), Escobedo (G. III) y los gallegos del Bergantiños (G. I). Por último, para conocer al “peor mejor” equipo de la Tercera División tenemos que viajar a las Islas Canarias, al Grupo XII, donde la Unión Deportiva Tamaraceite, conjunto que lleva el nombre de un barrio de Las Palmas de Gran Canaria, lidera su grupo de 20 equipos con 50 puntos.
El único equipo de Tercera no conoce la derrota en 2019
El conjunto de la Capital del Santo Reino no solamente estaría en cabeza en la tabla por puntos, sino que también se da el caso que es el máximo goleador no solamente de los 18 líderes de grupo, sino de toda la Tercera División con sus 72 tantos a favor. En sus antípodas, es decir, el equipo que mejor posicionado va de su correspondiente grupo con menos goles a favor es el Bergantiños, con 40. Curiosamente, los representantes del Grupo II son también, de todos los primeros clasificados, el que más goles encaja con un montante de 26. Los gallegos están sacando rentabilidad a sus datos si los comparamos con el resto.
El apartado de mejor equipo defensivamente hablado si está muy disputado con un total de cinco equipos empatados: Lealtad, Portugalete, Zamora, Haro y Socuéllamos solamente han tenido que sacar el balón de dentro de su propia portería en 11 ocasiones en lo que llevamos de temporada. ¿Y con quién nos quedaríamos si tuviéramos que elegir? Pues con los asturianos del C.D Lealtad, ya que los de la localidad de Villaviciosa son hasta el momento el único conjunto invicto de la Tercera División. Y hablando de empates, ¿saben quiénes son los primeros clasificados que más empatan? Porque aunque parezca broma, también aquí hay un empate entre Tarazona y Utrera.
Dormirse en los laureles
Todos estos datos pueden quedar en agua de borrajas, como avisábamos al principio, ya que todavía no hay nada escrito de manera definitiva. Ni en nuestra vida ni en el fútbol, como si a veces pudiéramos distinguir uno del otro. Una mala racha de juego, quizás inoportunas lesiones de jugadores claves, o tal vez la aparición de problemas económicos o institucionales pueden provocar la caída de estos futuribles campeones de grupo y perder la gloria de la victoria final. Pero esa gloria no solamente puede ser arrancada por sus más inmediatos perseguidores, sino que esa caída desde el cielo puede ser más alta aún y chocar contra el duro suelo de quedarse fuera de la postemporada.
Si comparamos la diferencia de puntos entre el primer y quinto clasificado, los lagartos pueden estar confiados con sus 21 puntos hasta el momento, pero más tranquilos estarían en el Grupo XV (grupo correspondiente a Navarra) ya que 23 puntos separan al líder de quedarse fuera de los playoff por el ascenso. No nos vamos ahora muy lejos geográficamente, ya que el siguiente es Euskadi con el Grupo IV, con 22 puntos. Por el otro lado, los que más peligro tienen de ver perder el preciado trofeo de la postemporada son, en orden descendente, los líderes de los Grupo X (Andalucía Occidental y Ceuta) y Grupo XVII (Aragón), ambos con nueve puntos de diferencia respecto al quinto clasificado; y quién más sufre: el Grupo III, correspondiente a Cantabria, el más disputado en la zona alta ya que solamente cuatro puntos marcan la distancia entre el primero y el quinto de la tabla.
Mientras que en otros grupos las jornadas que se disputan son por lo general la 26ª o la 27ª, nosotros como Grupo IX con 22 conjuntos hemos llegado ya a la treintena con la dura certeza que aún nos quedan 12 jornadas por contemplar y pelear. Porque el Real Jaén, al igual que los restantes 17 equipos que ahora viven en lo más alto; deben tener siempre presentes esas palabras que se susurraban a los oídos de los grandes emperadores, reyes, generales y todos aquellos que vivían su máximo apogeo: recuerda que no eres inmortal.