Emilio Antolín // @EmilioAntolin
Suma y sigue, y van tres consecutivos. La jornada 14 de la Liga 1|2|3 dejó a Manu del Moral como gran protagonista de entre los jiennenses de la categoría, entre los que solo Carlos, que también vio portería, y Javi Jiménez disfrutaron de minutos en un intenso cara a cara.
Y es que Javi Moyano, cuyo Valladolid empató ante el Sporting (1-1), y Juan Cámara, que vio desde el banquillo como el Reus perdió ante el Cádiz (1-0), se quedaron sin minutos, segunda vez consecutiva para el extremo y una semana más de ostracismo para el lateral, que lleva desde la primera jornada sin pisar el césped en Liga.
Pero centrándonos en lo positivo, Manu del Moral demostró que atraviesa un gran estado de forma volviendo a ser clave en la victoria del Numancia ante el Lugo por 0-1, disputando 82 minutos y siendo artífice de la diana soriana. En un duelo muy igualado, fue el veterano ariete el que decantó la balanza a su favor pasada la media hora de juego, cuando cazó un balón en la izquierda, se coló entre dos defensores y batió al meta rival con un disparo raso y ajustado al palo. Un golazo, de esos que le llevaron a lo más alto, de esos que valen su peso en oro con tres puntos que colocan al Numancia tercero en la tabla.
Misma suerte en forma de victoria corrió el Oviedo de Anquela y Carlos Hernández, que sumaron tres puntos con remontada incluida a costa del Nástic de otro jiennense, Javi Jiménez. Empezando por este, el lateral no fue de la partida en un duelo al que se sumó en el 68 en sustitución de Juan Delgado, apenas 25 minutos en los que Jiménez vio como su equipo pasaba de 1-0 a 1-2 sin poder hacer nada al respecto.
Cierto es que gran culpa de la remontada la tuvo, precisamente, el otro jiennense que estaba sobre el césped. Carlos Hernández, titular indiscutible en el Oviedo, abrió la lata para su equipo con un nuevo gol de cabeza en el minuto 72. Volvió a demostrar su poderío por alto el zaguero con un cabezazo medido que inició la remontada asturiana y puso la cara a un partido en el que él mismo dio la cruz, pues fue expulsado minutos antes del final. No impidió su rigurosa expulsión, sin embargo, que su equipo sumara los tres puntos ‘in extremis’, gracias a un penalti en el 92 que transformó Aarón.