El once de La Hoya Lorca en el encuentro de ida en La Victoria. Foto: Juande Ortiz.
Alejandro Copete // @Ale_Copete
Con la idea de volver a jugar los play-offs por ascender ya muy lejana (aunque no imposible), los esfuerzos del “Brócoli mecánico” pasa por certificar la buena temporada realizada y asegurarse un puesto en el bombo de la Copa del Rey del año próximo. ¿Será suficiente este primer paso para la ambición que confiesa el dueño chino del club? Ambición que ha provocado las primeras tiranteces con el Ayuntamiento de Lorca y que se rumorea que puede acabar con la marcha del equipo de la pedanía. ¿Otro nuevo destino en la vida nómada de esta entidad? Y como siempre cuando llega un nuevo dueño, las dudas sobre su figura que provocan marchas como la del Director Deportivo (14 años en el club) y otros miembros de la directiva.
Mientras preparan el papeleo para convertirse en S.A.D; la Hoya Lorca ha cuajado de nuevo una gran temporada pese a la revolución que hubo en verano en plantel y cuerpo técnico. Paco García (que no estará en el banquillo contra el Real Jaén por su sanción de 4 partidos) ha implantado en sus jugadores un estilo de juego claro donde prima la rapidez en las transiciones, aprovechar los errores que te otorga el rival y saber leer y actuar en consecuencia a lo que te pide el partido. Están en buena racha con 4 partidos consecutivos sin conocer la derrota (3 victorias y un empate) y han ido recuperando efectivos importantes como el lateral Alcántara. Por sanción no podrán jugar el defensa Pina y Ferrón, el delantero fichado en invierno del Linares. Y esto último es un problema para el equipo murciano ya que adolece de efectividad cara a la portería rival (36 goles a favor, 34 encajados).
El peso de los goles recaen en el mismo apellido: Carlos y Rubén Martínez con 7 goles cada uno y en aprovechar el buen tino a balón parado de Alarcón para generar ocasiones peligrosas. En la medular y en la defensa muchos jugadores importantes que han disputado muchos minutos como Poley, el central Mario Ramón y el guardameta Salcedo, titular indiscutible en La Hoya Lorca. Si hay algo que destacar por encima de todo en el “Brócoli Mecánico” es la velocidad, la cual hace mucho daño especialmente jugando como visitante, aunque el Artés Carrasco se ha convertido en una plaza difícil.
Tras un año muy irregular, el club de la pedanía de Lorca quiere coquetar con los grandes y aspirar a cotas mayores. Su nuevo dueño alterna su faceta de emprendedor para el futuro con la idea de construir una “fábrica” de jugadores en la zona para potenciar el fútbol en la región de Murcia con una visión realista del momento, llegando incluso a bajar al vestuario para impartir charlas técnicas a los jugadores durante el partido (Xu Genbao ha sido seleccionador nacional de China). ¿Se podrá aguantar la presión de un dueño tan intervencionista? ¿Seguirá aguantando el fútbol lorquino la guerra civil en la que lleva inmerso muchos años? ¿Se cumplirán los pronósticos en este año del Mono? Preguntas que no llevan a ninguna parte cuando el objetivo de la Copa se juega este sábado para ambos equipos.
