Dos jornadas restan para que el Real Jaén culmine su agonía en la temporada del regreso a la Segunda División B. Las mismas dos jornadas que faltan para que Rafael Berges abandone la entidad jiennense. El técnico cordobés se aferra a estas dos citas para intentar lavar su imagen y la de su equipo. La primera etapa será este domingo frente al FC Cartagena, un choque que «afrontamos el con el objetivo de ganar, es el último que queda en nuestro campo y vamos a sacar el once más competitivo para intentarlo. Mantener la motivación es complicado. He percibido desde el día del partido con la UD Almería B, y la reducción de las opciones, una mayor dificultad para tirar de este carro. Pero es mi obligación. Saldremos a competir, el equipo tiene que ganar. Ellos se juegan el descenso, no va a ser fácil, pero vamos a por los tres puntos. Intentaremos conseguir el triunfo en esta situación complicada. Deben vivir cada partido como si fuera una final, una oportunidad para ellos. El tiempo pasa volando, su carrera pasará rápido, y deben aprovechar las cosas. Tienen que defender al club en el que están y rendir a tope. Por circunstancias, no es fácil concentrar atención en el juego, pero es su responsabilidad. Yo voy a preparar el partido como siempre”.
La situación vivida por Berges en su etapa en el Real Jaén probablemente no pasará a la historia del club blanco por su excelencia. El rendimiento del equipo ha sido nefasto y los números cosechados han alejado la esperanza de lograr una plaza para el playoff de ascenso. El propio Berges admite que «las cosas no han salido, ha sido una pena. Hemos trabajado mucho, pero no han salido. Todos tenemos nuestra responsabilidad. Se me va la oportunidad de seguir en un sitio que aprecio, en una ciudad espectacular, y a la que me he adaptado bien, pero los resultados no han acompañado. Me llevo el mejor recuerdo, le deseo lo mejor a este club, y si puedo pedir algo a la gente, es que apoyen al nuevo proyecto. Es una lástima, lo intenté de todas formas, trabajando duro. Pero no ha bastado. No es momento de reproches, vamos a mirar hacia el futuro. Quizá otro proyecto, otro ambiente, menos pesimismo. Otra dinámica puede ayudar. Sólo conozco un camino, que es remando todos en la misma dirección. Todos podíamos haber dado más. Los de dentro, la gente de club. Todos. Hay que hacer cosas diferentes en las siguientes etapas. Si digo que todo ha sido fácil, estaría engañando. Que el Real Jaén CF tire para arriba es bueno para la ciudad, todos deben apoyar. Ha habido mucha desilusión por circunstancias. Hay que afrontar la realidad tal y como es. He sufrido mucho. Asumo mi responsabilidad en esta situación. Ojalá el futuro le sonría a este club y a esta ciudad que se merecen, como mínimo, estar en Segunda División».