Rosa Bárcenas
Si imaginamos por un momento que somos los protagonistas de la peli ‘Cariño he encogido a los niños’, y nos convertimos en minúsculos seres que han caído en el fondo de una cubitera llena de hielo y debemos salir al exterior en un tiempo razonable antes de que todos nuestro pobres músculos entumecidos se congelen definitivamente, es lo que podríamos denominar hacer un canuto en el argot alpinístico.
Así, como resumiendo y usando un idioma coloquial, la actividad en sí consiste en subir por una canal estrecha la montaña, salvando un importante desnivel en muy pocos metros de distancia, con inclinaciones de en torno a 45º-50º de pendiente en un terreno de nieve, roca y hielo. Por supuesto, equipados de toda clase de pinchos de acero forjado, con piolets y crampones, incluso con los dientes fuera por si pudieran ser necesitados.
Tener unos buenos gemelos para aguantar la posición de equilibrio echando todo nuestro peso en las punteras de las botas con el objetivo de meter bien los crampones en la nieve dura, y que de ese modo evitemos bajar en modo tobogán, tener muy bien cortadas las unas de los pies, gozar de un buen corazón, tener mucha rabia acumulada para pegar fuerte con los ‘piolos’ allí donde sea necesario y haber aprendido a tiritar y hacerlo con arte, son requisitos imprescindibles para meterse en un sitio así, ya que estas bellas formaciones, se forman en la más absoluta de las sombras y caras nortes.
Es una actividad invernal muy interesante, te enseña a moverte en un medio muy agreste y sobre todo a no perder la concentración, te permite ver otra perspectiva de la montaña, caprichosas formaciones hechas por el hielo y el viento, lugares donde la vida en invierno solo está de paso, como nosotros aquella mañana.
La sensación cuando sales a la cima del ‘couloir’ es abrumadora, ¡te sientes pleno! Tus pulmones están llenos de aire limpio helado, tu adrenalina burbujea, los rayos del sol calientan tu cuerpo acartonado y abajo te espera lo mejor, la satisfacción de haberlo logrado y celebrarlo…normalmente con bebidas muy hidratantes y antioxidantes como son la cerveza y el buen vino…