Visiblemente contrariado y enfadado. Así ha aparecido Gonzalo Arconada en la sala de prensa del Estadio de La Victoria tras consumarse la derrota de su equipo frente al San Roque de Lepe. El técnico blanco ha resumido su malestar manifestando que no entendía “cómo se han producido los dos goles en un partido que teníamos controlado, que estaba más para el tres a uno que para el dos a dos, y de repente en dos minutos, dos situaciones similares y dos goles. Es difícil de explicar. No tengo palabras. No lo entiendo”.
El entrenador del conjunto blanco ha reconocido que no ha comentado con sus futbolistas los detalles de las jugadas en las que se encajaban el segundo y tercer gol visitante porque “he estado viendo en el vídeo cómo se han producido las jugadas de los goles porque me ha sorprendido desde el banquillo cómo se han dado los dos goles. Hemos tenido dos errores muy graves en defensa. No quiero pensar en suspicacias pero ya digo que no le encuentro explicación para un partido que teníamos controlado. En caliente es preferible no decir nada”.
Arconada también asumía que para que llegaran los goles encajados en la recta final “lógicamente para que la pelota entre ellos han tenido que hacer algo. El partido lo teníamos controlado, donde queríamos. Después de un comienzo en el que no hemos estado finos. Lo teníamos en nuestra mano. Por eso repito que no entiendo. De una falta sacada casi en la frontal del área contraria, nos hacen un gol; y luego una falta en la que a nosotros suele ser muy raro que nos hagan gol en ese tipo de jugada, aparecen dos jugadores completamente solos y rematen. No lo entiendo. Acabamos con el ambiente enrarecido, con gritos, con insultos y no son situaciones nada agradables. Luego hay que venir aquí a dar la cara. En lugar de acabar bien, con un marcador a favor y sumando tres puntos más. La afición estaba con el equipo, el partido estaba yendo muy bien y de repente tiramos el partido de esa manera. Es inexplicable”.
Consultado sobre los próximos enfrentamientos que restan al Real Jaén para completar la actual temporada, el técnico donostiarra afirma que “primero hay que asimilar esto, porque ha sido un golpe muy duro. Ha sido una puñalada de las que hacen daño. Hay que tratar de digerirlo y ya después pensar en el siguiente partido”.
El propio Gonzalo Arconada aseguraba que las opciones que mantenía el equipo “las estamos tirando nosotros mismos, ahí no podemos echar culpas más allá de lo que nos haya podido afectar con esta situación que estamos viviendo. Hoy el partido estaba para ganarlo. Después de lo de hoy, lo que queda se convierte en un calvario. La evidencia no se puede negar. Generalmente no soy parco en palabras pero no le encuentro explicación a lo que ha acontecido”.
A modo de conclusión, el entrenador guipuzcoano señalaba que “estas cosas no son gratuitas, hacen daño. Este tipo de situaciones nos tienen que hacer daño. Si tenemos algo de amor propio, perder de esta forma nos tiene que hacer daño. Tal y como estábamos llevando el partido, no lo entiendo. Es normal que esté cabreado”.